Para la mayoría de personas, sentirse sano es algo primordial en sus vidas. Una clave para poder cumplir ese objetivo es hacer ejercicio. Pero muchos no están preparados para lanzarse a levantar pesas o hacer ejercicio cardiovascular. Aquí es donde entran el pilates y el yoga. Sin embargo, estas dos disciplinas se suelen confundir y normalmente la gente se pregunta ¿Qué es el pilates? o ¿Qué es mejor, el pilates o el yoga?
En realidad, los dos estilos de ejercicio son bastante diferentes y cada uno tiene sus propios beneficios. Desde Ítaca Pilates lo hemos desglosado todo para que puedas elegir cuál es el mejor para ti y para tu cuerpo.
¿Qué es el Pilates y qué beneficios aporta?
El Pilates es una disciplina creada por Joseph Pilates que comenzó la década de 1920. Desde ese momento no ha dejado de crecer su popularidad e incluso se han hecho miles de estudios científicos acerca de esta práctica. Su éxito se debe a que es un tipo de ejercicio que conlleva muy pocos riesgos, aporta numerosos beneficios y prácticamente todo el mundo puede practicarlo.
El principio básico del Pilates es mejorar la fuerza y flexibilidad de manera simultánea a través de una serie de ejercicios repetitivos que conectan el cuerpo y mente.
Aunque no es necesario estar en plena forma física para practicarlo, sí que es verdad que existen varios niveles de dificultad y que algunos ejercicios pueden resultar difíciles para alguien que nunca ha practicado esta disciplina. Sin embargo con un buen profesional como los de Ítaca Pilates, con un poco de práctica te puedes convertir en todo un experto.
¿Cuáles son los beneficios del Pilates?
Podríamos escribir 10 artículos solo hablando de los beneficios que nos aporta el Pilates. Pero como apreciamos vuestro tiempo aquí va un desglose de los beneficios más destacados de esta disciplina:
Control del core: El Pilates ayuda a los que lo practican a fortificar y desarrollar sus músculos, pero el que más se beneficia de esto es el core.
Alivia los dolores de espalda: Este es uno de sus principales beneficios y por el cual cada vez más gente se apunta al método Pilates. Gracias a los ejercicios de Pilates es posible descomprimir la zona muscular de los lumbares y la pelvis, lo que en la mayoría de casos sirve como solución a muchos dolores crónicos.
Aumenta tu flexibilidad: La práctica constante de Pilates te permitirá realizar movimientos más amplios.
Mejora la postura: El Pilates ayuda a aliviar tensiones de los músculos y articulaciones lo que da lugar a una mejor postura.
¿Qué es el yoga y que beneficios aporta?
A diferencia del Pilates, el yoga tiene un recorrido mucho más largo en la historia. Principalmente el yoga es un método lento y concentrado que se basa en estiramientos que combinan fuerza y mente.
Las práctica de yoga se hace a través de una serie de movimientos y posturas que se realizan de manera fluida con música instrumental y relajante de fondo. Cada vez que se hace una postura se hace una pausa para mantenerla durante un breve periodo de tiempo.
¿Cuáles son los beneficios del yoga?
Al igual que con el Pilates, los beneficios del yoga son infinitos. Os contamos los principales y más destacables:
Respiración más fluida: La respiración es primordial dentro del mundo del yoga. Una respiración correcta mejora nuestro estado de ánimo, reduciendo el estrés que sufrimos día a día a través de un ritmo cardíaco más lento y una relajación de nuestros músculos.
Músculos y huesos más fuertes: Esta disciplina ayuda a que perdamos menos masa ósea, aumentando nuestra flexibilidad y haciendo más resistente nuestro cuerpo.
Contribuye al sistema inmunológico: Al estar relajados se reducen en gran medida los niveles de cortisol de nuestro cuerpo (tenemos menos estrés). Además, también sirve para ayudarnos a conciliar el sueño y descansar mejor, lo que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico.
Mayor autocontrol: Gracias al yoga se aprende a controlar mejor nuestras emociones e impulsos lo que nos lleva a vivir la vida de una manera más controlada.
En definitiva, ambas disciplinas son beneficiosas para nuestra salud. Los beneficios que aportan son muy similares, pero la práctica es distinta. Para escoger es cuestión de gustos y necesidades, no consideramos que una sea mejor que otra, incluso pueden ser compaginables. ¡Esperamos haberte ayudado y que te sumes pronto a cualquiera de estas dos beneficiosas prácticas (o a las dos)!
